Apoyo a enfermos

El servicio sanitario no es asequible para una gran parte de la población de estos tres países debido al alto coste de las consultas médicas, medicamentos, hospitalizaciones, cirugías etc. Si bien los gobiernos emiten leyes para que todos los ciudadanos puedan acceder a un seguro de salud gratuito en algunos casos o caso gratuitos en otros, una gran parte de la población carece de ese seguro. Los hospitales públicos, a pesar de ser públicos, cobran precios inasumibles para estas gentes tanto por las atenciones necesarias como por los gastos de material sanitario llevando en ocasiones a las familias que no gozan de unos mínimos recursos económicos a situaciones límite de angustia, ruina y muerte. La realidad es muy dura en el caso de necesitar servicios médicos de cierta entidad.

Todas las manos son pocas en este apartado de eterna mejora en los países más necesitados. Las dificultades se acumulan y a las enfermedades propias de relevante importancia como pueden ser la malaria o el ébola, hay que sumar la falta de infraestructuras, la suciedad, la falta de agua saneada o la inexistencia de servicios adecuados de limpieza, además de la aparición de pandemias como la que estamos viviendo.

Apoyo diverso a enfermos y su entorno: venimos colaborando con este servicio que la congregación Hijas de la Caridad realiza en Cochabamba dedicado al apoyo en situaciones de pobreza extrema a enfermos y sus familias, ancianos abandonados, niños con desnutrición y un largo etcétera en el que se podrían incluir todas las penalidades que lleva implícita la miseria tratando mayormente de minimizar los costes a los que se enfrentan. Cuentan con la colaboración de médicos especialistas que ofrecen su trabajo gratuitamente teniendo convenios con hospitales y clínicas privadas para reducir los costos.

Igual que las ayudas para intervenciones quirúrgicas antes señaladas, cuando los enfermos se personan pidiendo ayuda se hace un estudio social y se les apoya según sus necesidades, muy pocas veces al 100% ya que siempre, por muy pequeña que sea, se les pide una mínima cantidad.