Sabemos que el problema del agua se va agudizando no solo en Bolivia sino en todo el mundo y no vamos a comentar aquí por ser obvio lo que la escasez de agua significa. En Bolivia el año climatológico o pluviométrico se divide en dos temporadas la seca y la lluviosa. La seca va aumentando a costa de la época de lluvias que actualmente dura de principios de noviembre a mediados de marzo. Para aprovechar las aguas de esos meses hemos venido construyendo atajados (lagunas artificiales) en diferentes zonas que puedan alargar los períodos de regadío y traídas de aguas desde ríos o manantiales. Cuando los caudales de estas traídas son pequeños, realizamos también estos atajados en donde se vierte el agua de manera que se pueda ir almacenando. Cada comunidad formula su propia ordenanza de funcionamiento y distribución de las aguas recogidas. En la actualidad estamos realizando estas traídas de aguas en comunidades de la zona de Independencia. Requisito indispensable antes de comienzo de las obras es el acuerdo de todos ellos así como con las comunidades colindantes por las que en ocasiones pasa el trazado de la traída de aguas. Mamoré pone los materiales y los beneficiarios la mano de obra.
La traída de aguas está suponiendo la creación de huertas familiares y frutales con la consiguiente mejora alimenticia y económica. En ocasiones, la alcaldía de la zona presta su maquinaria para construir pistas que faciliten el acceso a las huertas creadas.